La pobreza energética es un problema que afecta a millones de personas en todo el mundo. En España, se estima que alrededor de 3 millones de hogares no pueden mantener su vivienda a una temperatura adecuada en invierno o verano.
Cruz Roja está trabajando para utilizar la tecnología para detectar casos de pobreza energética y ayudar a las personas afectadas. La organización ha desarrollado una experiencia piloto en Andalucía con la colaboración de Qualcomm, en la que se han instalado sensores en viviendas de Sevilla para corroborar en qué condiciones viven algunas familias en posible situación de vulnerabilidad.
Los sensores miden la temperatura, la humedad y la calidad del aire en las viviendas. Con esta información, Cruz Roja puede identificar casos de pobreza energética cuando se superan los umbrales que la OMS determina como "confortables".
En el caso de la experiencia piloto, se han verificado casos de pobreza energética en verano, con temperaturas registradas de hasta 40 grados en un largo periodo de tiempo en la vivienda. La detección de casos de pobreza energética a través de la tecnología IoT tiene un impacto social positivo. Permite a Cruz Roja ayudar a las personas afectadas a mejorar sus condiciones de vida.
En el caso de la experiencia piloto, Cruz Roja ha proporcionado a las familias en situación de pobreza energética kits de eficiencia energética, formación en ahorro energético y otras medidas para mejorar el aislamiento térmico de sus viviendas.
La tecnología IoT tiene el potencial de ser una herramienta eficaz para detectar casos de pobreza energética y ayudar a las personas afectadas. Cruz Roja está trabajando para desarrollar esta tecnología y ampliar su aplicación a otros ámbitos, como la autonomía personal o la soledad no deseada.
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